Cuento finlandés
El viejo granjero y los estafadores
Engañar no compensa y eso es lo que aprenden los dos estafadores de la historia. Aunque engañan al viejo granjero, éste les da una buena lección.
Hace mucho tiempo, en los confines del norte vivÃa una tribu
Todos los jóvenes cazaban y pescaban; llevaban a sus familias lo que capturaban o mataban. Pero habÃa una anciana que vivÃa a las afueras de la aldea y que no tenÃa marido, hermano o hijo que la ayudara con la comida. Entonces los vecinos se turnaban para ayudarla y darle una parte de lo suyo.
La anciana se sentÃa sola. ¡QuerÃa una familia! Pasaba la mayor parte de sus dÃas caminando por las frÃas e invernales costas, rezando para tener un
La pequeña bola de pelo blanco yacÃa inmóvil. Al principio la anciana pensó que estaba muerto, pero pronto se calentó y gimió un
A partir de ese dÃa, madre e hijo comenzaron a volverse muy cercanos. Ella le hablaba y parecÃa como si el osezno hubiera adquirido una mente
A los aldeanos no les molestaba el osezno y los niños de la aldea lo querÃan mucho. Todos los dÃas venÃan al iglú de la anciana. —¿Puede salir a jugar Nakoda? ¿Por favor,…