Tereza Sebesta
El río
Conoce a un simpático río, escucha su historia y acompáñalo en su viaje por el mundo. Este apacible cuento es una lectura perfecta para la hora de dormir que enseña a los niños los ciclos del agua en la naturaleza.
Hace más de mil años, existía en Chile una tribu llamada
Cuando mataban un animal, se comían su carne cruda, porque sin fuego no tenían medios para asarla o cocinarla. Esta carne era chiclosa, fibrosa y nada sabrosa. Por eso preferían comer frutas como bayas silvestres, pequeños frutos secos o plantas que eran más rápidas de comer que la carne.
Los mapuches siempre se levantaban con las primeras luces de la mañana para tener tiempo suficiente de hacer todo el trabajo del día, antes de que cayera la noche. Sin fuego, el sol era su única fuente de luz. Siempre pasaban las noches escondidos en la seguridad de sus cuevas hasta la mañana
Una noche fría de cielo despejado, un joven cazador llamado Caleu se quedó fuera de la cueva porque no podía conciliar el sueño. Había dado vueltas y vueltas en su cama, pero no estaba cansado. De repente, vio caer del cielo una estrella fugaz seguida de una larga cola de
La estrella cayó en un valle cercano y el valle se iluminó inmediatamente con una luz cegadora. Caleu estaba realmente asustado, ¡nunca había visto nada igual en toda su vida! El joven corrió rápidamente a su cueva y se quedó allí escondido hasta el amanecer, temblando como un flan envuelto en su manta.
Cuando llegó el día siguiente, Caleu no le contó a nadie lo que había pasado la noche anterior. No quería asustar a toda la tribu.…